El actor Ben Foster se mete en la piel de Harry Haft, un hombre que es enviado a Auschwitz. Allí, sobrevive no solo a los horrores del campo de concentración, sino también al espectáculo de boxeo de gladiadores que se ve obligado a realizar con sus compañeros de prisión para divertir a sus captores. Sin que aquellos que intentan acabar con él sean conscientes, la voluntad de supervivencia de este hombre está impulsada por su lucha para reunirse con la mujer que ama.